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INTRODUCCIÓN A LA PSICOLOGÍA TRANSPERSONAL

“Nosotros, con nuestras vidas, somos como islas en el mar, como árboles en el bosque. El arce y el pino pueden susurrarse el uno al otro con sus hojas… Pero los árboles también entrelazan sus raíces en la profundidad de la tierra, y las islas también están unidas a través del fondo oceánico”

William James

 Breve Historia de la Psicología Transpersonal

Nacimiento

Si bien —según algunos autores— podemos establecer los orígenes de la Psicología Transpersonal en William James, psicólogo y filósofo nacido en EEUU (1.842-1.910) y pionero del pragmatismo estadounidense, no sería hasta la década de los años 60 que esta no cobraría fuerza como tal y se expandirá.

William James era un entusiasta investigador de los procesos subliminales de la conciencia y de los fenómenos paranormales. En 1902 publica la obra Las Variedades de la Experiencia Religiosa, por la que se le considera como el fundador de la “psicología de la religión”. Tal vez por primera vez hasta entonces, James enfocó el estudio de las experiencias religiosas desde una perspectiva psicológica, estando estas basadas en las experiencias directas de diferentes personas individuales. Vemos, por tanto, que fue pionero en empezar a unir religión/espiritualidad con psicología.

Definición

No obstante, como ya mencionábamos anteriormente, la Psicología Transpersonal irrumpe con fuerza y cobra cuerpo a finales de los años 60 de la mano y a raíz del interés de un grupo de psicólogos, psiquiatras y psicoterapeutas, entre los cuales podríamos citar a Abraham Maslow, Stanislav Grof, Aldous Huxley, Ken Wilber, entre otros. El motor que les mueve, fundamentalmente, es la necesidad de expandir el marco de la psicología humanista e ir más allá del interés por el yo individual y, centrarse en el estudio de la dimensión espiritual y trascendente. El objetivo principal sería que los seres humanos trasciendan el sentido individualista y así poder identificarse con una conciencia mayor. Las teorías predominantes de la época eran demasiado estrechas para dar cabida a toda la potencialidad humana. Se hace necesario, por tanto, ir más allá de los modelos preestablecidos hasta el momento para poder entrelazarse con esferas que pertenecían al campo de las religiones o de la metafísica.

Occidente mira de cara a Oriente y curiosamente encuentra en las antiguas y milenarias sabidurías coincidencias y paralelismos que empezaban a despuntar y descubrirse en la nueva ciencia.

Maslow (1968/1979) dice al respecto:

“Considero a la Psicología Humanista, esta Tercera Fuerza Psicológica, como algo transitorio; como un allanamiento del camino hacia una Cuarta Psicología aún «más elevada», una psicología transpersonal, transhumana, centrada en el cosmos más que en el bien y las necesidades del hombre, que trascienda la naturaleza del hombre, su identidad, autorrealización, etc.” (p. 12)

El término transpersonal significa ir más allá o a través de lo personal; ir más allá de la máscara del carácter, de lo que denominamos personalidad, y de esta forma trascender la habitual sensación de identidad para poder experimentar una realidad mucho más grande y significativa.

Áreas que engloba la Psicología Transpersonal                      

Las áreas que tienen cabida dentro de esta corriente psicológica —aun a riesgo de simplificar demasiado dada la amplitud de la misma—, son las siguientes:

  • Procesos, valores y estados transpersonales.
  • Experiencias cumbre.
  • Estados de interconexión y unificación espiritual.
  • Experiencias místicas. Éxtasis.
  • Conciencia unitiva.
  • Estudio de los estados no ordinarios de consciencia, ENOC.
  • Experiencias trascendentes y metafísicas de la vida.
  • Expansión de la conciencia individual.
  • Teorías y prácticas de la meditación.
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Igualmente, no podríamos dejar de mencionar el legado y las influencias que Oriente ha aportado a la misma, como por ejemplo el Budismo, el hinduismo, Meditación Zen, el Vedanta Advaita y todas las escuelas filosóficas (Filosofía perenne) y místicas.

Por la parte de Occidente bebe también de las neurociencias, la psicología cognitiva, la neurofisiología, etc.

Referencias

  • Maslow, A. (1979). El Hombre Autorrealizado. (Trad. R. Ribé). (3ª ed.). Editorial Kairós. (Trabajo original publicado en 1968).

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